miércoles, 28 de julio de 2010

AMOR DE INFANCIA

Segunda Edición
Este año ha sido de bendiciones, el estar al lado de mi familia (mi esposo y mis hijos) ha brindado oportunidades de disfrutarlos al 100%, escuchar sus inquietudes frente a cada experiencia vivida en el momento justo, sin intermediarios como sucedía antes cuando laboraba y era mi esposo quien me comentaba lo que mi hijo e hija habian dicho a la niñera cuando llegaban del colegio...en fin, ellos ya cansados dormían y ni modo, me perdía de sus sueños vividos.

Hoy de forma espontánea, llega mi niña de 6 años con sus ojos abiertos y sus palabras compitiendo una con otra para expresar lo "l i n d o" que es su amigo Juan David, que en el descanso le ha dicho "n e n a" y que aunque son amigos, los compañeros dicen que son "novios". Mis ojos de madre no se pierden ninguno de sus libres gestos y emociones cuando dice: "¡mamí y a mi me gusta!"

¡Le gusta!

Con 6 años mi hija está dando sus primeros pasos hacia el enamoramiento, han disminuido las frases edípicas de "me casaré con mi papí" y lejos de sentir celos, enojo y/o preocupación, me lleno de sonrisas.

En silencio, su padre la mira y me mira; luego a solas me dice: "¿mija tan chiquita, eso es normal? y sigo riendo...

Como madre no la aliento en sus "amores infantiles", por llamar asi al bello sentimiento que despierta en ella, pero tampoco la reprimo ni censuro. Es una hermosa oportunidad para afianzar su autoestima, su valía, su habilidad para socializar, para comunicarse conmigo sin rivalizar por su padre ( Edipo ), sino ser madre orientadora y amiga.

No es falta de afecto aquel dulce despertar, ni hay que darle más importancia de la que tiene a sus confesiones de amor. Es una vivencia que los infantes expresan diferente, según su capacidad de adaptación y personalidad. Por ejemplo, el "afortunado amigo de mi hija" la protege, pero en ocasiones se ve "timido y achantado" por tanta afectividad. Por ello, como progenitores en vez del regaño y la represión, es una oportunidad para ayudarles a entender sus sentimientos y sanas emociones. En el mes de mayo, compartía éste poema inspirado en mi hijo mayor que con 9 años vivía igual su primera ilusión.

Cuando la veo siento que me erizo,

su cabello es bien bonito

y si en clase a mi lado se sienta,

¡mi déficit de atención aumenta!

¿Mami es eso normal? ¿A ti te pasaba?

Ayer le dije que me gustaba

y ella se quedo callada. ¡Tengo susto!

Si yo no le gusto, me sentiré triste.

Pero sé, tu me lo has dicho:

el dolor y la tristeza, como la alegria

son parte de la vida humana.

Cada niño y niña vive una ilusión, algunos mas inhibidos que otros. Algunos se enamoran de una tía, un tio desplazando poco a poco el Edipo hasta fuera del vínculo con las figuras paterna y materna respectivamente, llevando consigo las alegrías, dolores, frustraciones en una autoestima labrada con el discurso, actitudes y afectos de esa primera y significativa relación vincular (padre -hijo/a-madre).

La primera ilusión puede ser una reconciliación con la autoimagen incorporada y frecuentemente fracturada por el discurso maltratador de los progenitores o vinculos significativos.

También puede causar una herida dolorosa y traumatica dada la memoria afectiva de la relación parental que se recrea, reafirma en detrimento de la autoestima del menor, o en consecuencia del maltrato recibido no permitirse (alejarse, ensimismarse) por una autoimagen y autoestima negativa relaciones de disfrute socioafectivo. O simplemente, ¡dar mucho de lo que se ha recibido!

De allí la importancia de cómo se acompaña la vivencia de los infantes en su primera ilusión o un primer amor. Ojala sea como el título del libro de Boris Cyrulnik "El amor que nos cura".

Y tu, ¿recuerdas esa experiencia temprana?

sábado, 24 de julio de 2010

CREER, CONFIAR Y TRANSMITIR LA CONFIANZA

Hoy David ha buscado el informe de logros del segundo periodo escolar acompañado de su padre. Siempre, "siempre" había sido protagonista en este momento, pretendiendo escuchar de primera mano a los profesores, atender las quejas o demandas de los mismos frente a dificultades del niño, y debo aceptar que como madre/psicóloga también justificar inconvenientes en los procesos académicos, comportamentales y sociales de mi hijo debido al diagnostico de TDHA del que ha sido sujeto.

Pero me he quedado tranquila en casa, permitiendo que David sea protagonista de sus logros y dificultades, y que su padre comparta con él este momento de manera más cercana (sin la sobreproteción de mamá y las justificaciones de la psicóloga) que en tiempos atrás sin consciencia - no permitía el flujo natural de la propia semilla que tiene en sí misma sus cualidades, capacidades y talentos necesarios para crecer -.

Si los que "educamos" - padres, madres, profesores - no creemos, no confiamos, no trasmitimos esa confianza a los niños, niñas y jovenes es probable que el potencial de esa semilla no surja, se limite o se mutile irreversiblemente.

David ha llegado a casa feliz y me ha dicho: "Madre me fue bien, mi comportamiento mejoró y los logros de todas las materias alcancé. Debo no ser tan rápido y trabajar con más calidad. Me esforzaré" Ante ello, sonreí y sin mirar el informe le felicité, le abracé y le expresé mi orgullo.

Al rato su padre me comentó su conversación con la titular de su grupo escolar, y aunque haya algunas "cosas" en que seguir trabajando. No hay mayor logro que David reconozca su talento y su capacidad de ser protagonista de su propia vida. Una vida sin minusvalías ni autocompasiones que limiten su gran potencial.

Hoy festejamos en familia por los logros de nuestros hijos: David Esteban y Laura Camila. Para ellos nuestro amor y nuestra confianza siempre INDEPENDIENTEMENTE DE LOS RESULTADOS que arrojen el estándar social.

Mira el video y compartamos cavilaciones al respecto.

CONFIAR

La confianza es uno de los primeros logros del desarrollo que supone debemos alcanzar los seres humanos según lo expuso Erik Erickson en su teoría psicosocial. Es ella, la que permitiría adecuadas relaciones interpersonales y la base fundamental de toda relación afectiva. El equilibrio justo de dar y recibir, la apertura y la protección.
Pero, ¿quien ha de confiar? si antes de nacer ya se conoce el rechazo y el desamor; en muchos casos, ¡se nace de milagro! cuando las famosas pastillas abortivas o los remedios caseros no lograron su objetivo.

¿Quien ha de confiar? si en vez de un tibio pecho me apartan a un lujoso corral y me brindan un tetero con leche artificial luego de tanto llorar y gemir para ignorantemente "fortalecer mis pulmones". ¿Quien ha de confiar? cuando no se conoce una mano sostenedora que me arrulle o me enseñe a caminar, ya todo esta artificialmente hecho (coches, caminadores, sillas mecedoras, etc.) pues la mujer ha necesitado salir de casa a laborar y al llegar el cansancio la derrumba. Lo mismo le pasa a papá, y la niñera que han contratado con suerte no me maltratará pero un afecto genuino no me dará.

¿Y si no logro confiar en mi madre, padre o sustituto significativo; como he de creer en los otros y hasta en mi? El vacío afectivo, los temores y la rabia de no sentirme amado de no ser reconocido provocaran inconscientemente en mi conductas, actitudes y formas de relacionarme bastante peculiares, neuróticas y hasta caóticas que progresivamente repercutirán en todas las áreas de la vida.

Sentir y /o recuperar la confianza es un camino díficil cuando lo transitado ha sido pedregoso y con espinas. No obstante, es posible orientado desde el autoconocimiento y el reconocimiento del dolor emocional.

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lunes, 19 de julio de 2010

Sin pena ni verguenza: ESTA ES MI SALA DE LACTANCIA

Entre risas y carcajadas transcurrió el encuentro con mis amigas de Barranquilla, un gran afecto fluye para cada una de ellas. Pero de repente, la mirada atónita, los comentarios directos y espontáneos no se hicieron esperar cuando Santiago pidió su apetitosa "teta".
 
 
¡Carajo, tu dando teta, no te da pena!
 
 Entre otras expresiones matizadas del acento costeño que las caracteriza. ¡Todo una psicóloga, eso que es!
 
Y devolviendo sonrisas no vacilé, y sin pena ni vergüenza saqué mi teta para dar a mi hijo el alimento afectivo que solicitaba. No di ninguna cátedra sobre el tema, no era el momento para ello pero tengo clara mi posición.
 
Comparto y apoyo la Lactancia Materna hasta que mamá y bebé decidan. Y quiero hoy compartir la entrada de María Covadonga Mora Delgado en su blog Criando amando donde promueve una campaña publicitaria que ayuda a reivindicar la posibilidad de dar el pecho donde queramos, donde les venga bien a nuestros bebés, niños y niñas; por encima de miradas indiscretas o comentarios absurdos.
 
Como la fotografía mostrada en ésta entrada, es el momento de decir ESTA ES MI SALA DE LACTANCIA. El derecho de los niños y niñas prima sobre los demás.
 
Les invito a seguir mi labor de consejería en lactancia a través de SERVICIOS PROFESIONALES PARA LA SALUD PRIMAL Y EL BIENESTAR HUMANO, como Psicóloga y Madre pienso que los beneficios integrales de amamantar son irremplazables.
 
 
Liliana Castro Morato
Servicios Profesionales para la Salud Primal  y el Bienestar Humano.
Psicóloga, Educadora, Doula y Consejera para la Lactancia Materna. Acompañamiento Profesional en cada momento vital.
Contacto 3007253852

sábado, 17 de julio de 2010

¡UN GRITO DE INDEPENDENCIA!

Segunda Edición
Celebran el Bicentenario de la "Independencia" de Colombia este próximo 20 de julio. Pero hay otros gritos de independencia que es necesario no acallar, esos que reprimidos traen consigo infelicidad.

Confieso que fuí víctima del desamor, de la burla y la traición. El maltrato estuvo presente en la historia de mi vida. Esperando ser amada y reconocida, permití ser manipulada, agredida por esa necesidad fundamental que es el Amor.

¡Un grito de independencia surge, para ser libre hoy!

En otros tiempos: la moda, el consumismo, la glotonería, la vida social superficial, aparentar y no ser, enamorarme y no amar, con ello pretendía - sin saberlo - llenar el vacio que solo suple el afecto sincero y el amor genuino que permite el crecimiento individual y de dos.

Hoy con la consciencia más despierta y no tan "zombineurótica" (término del blog de Jose Luis) me permito identificar la marca en el presente de un pasado que hirió los afectos, los vínculos y la autoestima. Esto brinda la oportunidad de amar y ser amada, y también de educar un píe más adelante.

Me independizo cuando abro los ojos de mi consciencia, despierto y claramente veo las cadenas que traigo consigo en la mente y el corazón. Cadenas por las palabras dichas y las acciones de quienes he creído haber amado y en la vida concedí un valioso significado que no fue correspondido o valorado.

Quizás en tu historia fueron las palabras o acciones de tu padre, tu madre, o aquella pareja de juventud, la hermana que te desvalorizaba o con la que siempre tus padres te comparaban. En fin; cada vida, la tuya y la mia, hay una cadena que desatar para ser más libre. Muchas veces reprimimos el sentimiento de ira, dolor y frustración, pero es necesario no acallar ese grito y necesidad de independencia en pro de un mejor bienestar.

Esta "libertad e independencia" cuesta! Dolor, lágrimas, pérdidas y alejamientos, pero de seguro traerán potenciales ganancias en tu vivir.

Cómo el Bicentenario de la Independencia que celebra Colombia el 20 de julio, hay independencias que parecen pero no son reales.

Siempre será bueno esclarecer y confrontar el diario vivir, para darnos cuenta que muchas veces cambiamos simplemente de "objeto", de "amo" pero el conflicto, la cadena que sujeta a la esclavitud del desamor, incompletud, infelicidad sigue allí. Parece que se repitiera la historia, lo de ayer - hoy - pero con otro personaje, una película reencauchada...

Haciendo una tarea con mi hijo encontré este video, te puede ser útil para entender a lo que me refiero cuando escribo "cómo la independencia de Colombia hay independencias que parecen pero no son reales"

Y espero que pronto puedas celebrar tu "independencia":

Un mejor bienestar Emocional.

martes, 6 de julio de 2010

¿ODIAS LO QUE AMAS?

He aprendido en la linea del tiempo que el amor y el odio, la alegría y la tristeza, la aceptación y el rechazo, la saciedad y el hambre, el placer y el dolor, la vida y la muerte, por ejemplo; son parte inherente de la vida misma y negarlo no hace que desaparezcan o se tornen con facilidad hacia lo contrario.

Se dificulta mucho hablar de lo que nos han enseñado "avergüenza" o es "pecaminoso" o " no se debiera sentir" porque es "malo". Pero es precisamente de ello que hay que hablar, para que fluya con facilidad el sentimiento y se desate el duro nudo del conflicto que muchas veces paraliza, hiela, enferma, nos hace infelices y de una u otra manera convierte nuestras relaciones en tormentos ambivalentes y desorganizados.

Ese nudo que muy probablemente está congelado en el pasado, en nuestra relación con mamá, papá o persona más significativa; que se recrea con nuevas vinculaciones y esas con otras y otras..., hasta perpetuarse desafortunadamente en la crianza de nuestra descendencia. Frustraciones que nos vuelven intolerantes, ciegos de nuestras emociones, impulsivos en nuestras conductas, marionetas de nuestros vacíos y dolores.

Es urgente una nueva forma de amar y educar, pero ésto no es posible, si negamos nuestra historia y nuestros sentimientos. Es el primer paso.

Expresar coherente y conscientemente nuestros sentimientos: Sentir rabia, odio, frustración, rechazo por un ser querido parece ser inadmisible para nuestra consciencia. ¡me castigaría dios! ¡no debo sentir eso! ¿cómo he de odiar a mi madre o a mi padre? ¿cómo he de odiar a mi hijo /hija? Este sentimiento es fuertemente reprimido y transformado forzosamente por lo contrario. La culpa que genera éste sentimiento se convierte en sobreprotección y complacencia exagerada, pero como un dique de contención no asegura definitivamente nuestras relaciones del embate fuerte de la agresividad e ira reprimida.

Al ser padres y madres (con nudos previamente adquiridos - neurosis establecidas- casi siempre inconscientes) enfrentamos día a día a situaciones que causan irritabilidad y molestia pero el manejo dado a ello muestran el caudal interno.

Te has preguntado ¿cuántas veces al día te enojas o sientes rabia con tu hijo/a? Situaciones como el llanto incontenible, la oposición y la transgresión de los limites, algunas provocaciones que p a r e c e n conscientes por parte de los pequeños movilizan en muchos progenitores rabia, desconcierto, culpa que desafortunadamente no siempre se expresa sin maltratar, herir, dañar y marcar la vida de los infantes.

Nadie dice que dejes de sentir. Es sano sentirlo con libertad, sin culpa ni miedo y expresarlo de esa manera: "Estoy molesto", "estoy triste", "estoy enojada" , "siento rabia", "no me gusta", ... de esa manera el otro no será dañado ni atacado en su estima y podrá ver en la conducta, la acción que perturba o molesta la convivencia. Siendo así, el enojo o rabia no es con tu hijo/a sino hacia la conducta o actitud demostrada por el chico.

Cuando se magnifican éstas situaciones con violencia y maltrato, la historia personal y el inconsciente tienen un papel fundamental en el conflicto vivido que matiza fuertemente cualquier relación. Esta debe abrirse paso en la consciencia si se quiere avanzar en una nueva forma de amar y educar; de lo contrario, se mezclan sin remedio conductas, actitudes y personas.

Liberar y reconocer sin culpa ni autocastigo, el sentimiento reprimido de dolor y frustración genera una nueva oportunidad de curación, en aquellos que en el caso de rabia u odio a sus progenitores también sientan la pesada carga de una historia. No se obliga a amar, ésto podría fluir como el perdón luego que se desata el nudo; lejos de imposiciones y dogmas.

Aún para los cristianos, seguidores de una fe y no de religiones, entender que Dios es un Dios de amor, de aceptación y perdón es esencial para la comprensión de ésta entrada.

El amor y el perdón entonces, fluye dinámica y libremente en una relación personal con el Creador en donde la expresión de éstos sentimientos conduce como dicen las Escrituras a la sanidad. (Romanos 10:10) La llamada "doble moral", la apariencia de una vida cristiana o una religiosidad llena de penitencias, sacrificios, expiaciones no es compatible con la espiritualidad, ni proporciona sanidad ni libertad desde mi humilde punto de vista.