jueves, 8 de diciembre de 2011

¿QUIEN PERDIO EL AÑO?


Caminando me he encontrado con una escena, la  de un padre diciendo a su hijo: "has perdido el año (escolar) y aun así me pides que te compre ese regalo? Si no mereces ni el  regalo de navidad por cuanto no hiciste nada este año...."

Debo confesar que mi hijo mayor  tampoco alcanzó los logros académicos que hacían que fuese promovido al siguiente año escolar, pero él no ha perdido el año! 

Se que para algunos es difícil entender lo que digo, si pensamos en cuanto dinero se ha pagado mes a mes en un colegio para que al final no sea promovido dada las dificultades no superadas en 3 o mas de 3 asignaturas, si pensamos en lo que nos ha costado conseguir este dinero y en lo difícil que esta la situación laboral, etc...

Atendiendo a los anteriores pensamientos combinados con sentimientos de enojo y frustración "caerle" al niño o la niña en términos de castigo, opresión y venganza es la salida emocional mas frecuente.

Pero quiero compartirles esta perspectiva:

 ¡miren la fotografía!

El camino de aprendizaje es hasta el último de nuestros días.

Y la no promoción al siguiente año escolar  no significa que no se haya aprendido nada.

 Por supuesto que no se logró demostrar al sistema homogéneo y estático que si existió aprendizaje,  pero si se aprendió y quizás mucho mas de lo que creemos!!

Y quizás.... (?)  a pesar de haberles dejado solos o solas, de no dedicarles el tiempo, la atención,  el apoyo; a pesar de no haber depositado en ellos la confianza para que se sintieran capaces,  seguros  y sobre todo,  independientemente de sus resultados hacer sentir que contaban con nuestro amor incondicional.

Incluso debemos preguntarnos nosotros como padres y madres, y aún los docentes  ¿Qué hemos aprendido? y cuestionarnos si seremos nosotros como sociedad adulta los que hemos perdido el año, al no ver las potencialidades diversas de nuestros niños y niñas, heterogéneos, de condiciones diversas e individuales, de pensamiento creativo, inmerso en un mundo hiperactivo pero al que se le obliga a encasillarse, prestar atención, contestar de una manera y no de otra,  niños y niñas que en su mayoría se aburren de la manera en que se enseña el contenido académico que luego evaluamos?

¿Creen ustedes que siendo reiterativos en nuestros errores y seguir pretendiendo que a pesar de no cultivar lo necesario en la persona de nuestros hijos e hijas, ellos DEBEN responder a todas nuestras demandas y exigencias, a las demandas de esta sociedad cuadriculada y estar bien, porque según nuestros haberes no carecen de "nada"?

Como lo observo, estarán en el mismo curso el próximo año, pero no habrá repetición alguna.

Ningún día es igual a otro jamás!

Es necesario nutrir a nuestros hijos e hijas a partir del discurso paterno y materno. Basta de Pedagogía Negra y de seguirle el juego a la alienación que nos trata cual naranja mecánica y sembrando que si no estamos dentro del juego  no somos, no podemos!

Claro que somos, claro que podemos, claro que sentimos, claro que vivimos y no para solo para producir sino para disfrutar consciente y responsablemente.

Y es que sin disfrute no hay aprendizaje que resignifique la existencia, cuando alejados de la esencia del ser hemos desdibujado su significado.

No necesitas pensar como pienso ahora yo. Solo comparto esta cavilación para que la consideres. De nuestra parte hemos aprendido,  conversado y  apostamos al disfrute diario de  las vacaciones con  detalles para todos, pues todos hemos ganado... NOS GANAMOS UNOS A OTROS.
 
Un abrazo con Fuerza Oxitocina,
 
Liliana Castro Morato
Psicóloga, Educadora, Acompañante Perinatal - Doula, Consejera en Lactancia Materna
Servicios Profesionales para la Salud Primal  y el Bienestar Humano
Contacto: 3007253852 Bucaramanga, Colombia.
  


4 comentarios:

Ismag dijo...

Hola Liliana,

Queria compartirte un enlace, de un doctor colombiano como tú, me ha gustado mucho y me ha hecho pensar en tí. No sé si lo conocerás, se llama Jorge Carvajal, y éste es el enlace: http://www.psikologia.com/ternura.htm

De paso felicitarte por el libro publicado "Una nueva maternidad", del que formas parte. Me parece una apuesta bonita y auténtica, cuyo autor en lugar de ser una sola persona, es todo un conjunto, es simplemente maravilloso.

Y ya que estoy comentar tu post. Segun yo lo veo un año jámás se pierde, siempre se aprende, incluso más cuando no consigues aprobar el curso. ¿Por qué? pues porque las crisis hacen pensar, las dificultades abren la mente, agudizan el ingenio. Aprender en la vida no es aprender un oficio, aprender es conocerte a ti mismo, aprender es averiguar de lo que eres capaz de hacer, a veces suspender el curso solo significa que tu talento no lo ha desarrollado ninguna de las asignaturas impartidas. Por ejemplo, si tu talenteo es cantar, bailar o jugar a futbol, lo mas lógico es que suspendas matemáticas y tantas otras. No hay por qué pensar que el niño no es bueno, simplemente no está estudiando lo que debería. Todos tenemos un talento especial en algo, basta descubrirlo.

Un abrazo.

LILIANA dijo...

Ismag siempre me alegra tu visita. Primero decirte que no hago parte del libro Una Nueva Maternidad, fue un regalo de cumpleaños maravilloso al que por supuesto dedique un post dado su importancia y su mensaje.

Y si, definitivamente un año jamas se pierde! buen dia cada dia para ti y buen 2.012 por supuesto!

PAMELA dijo...

Recuerdo con tensión esta epoca de entrega de notas...
Cuanto sacaste en matematicas, arte o conducta???
Pero nunca hubo un espacio para analisar el año escolar terminado, que te gustó mas? que te sirvio mas?? que harias diferente??
Comparto el tema que siempre se aprende... pero desafortunadamente dejamos pasar de largo momentos de reflexión, de analisis, que harán el proximo año (escolar o no) un año mas fructifero!
Si el sistema no puede evaluar asi los niños... que se nuestra responsabilidad de papás, mostrarles la realidad del aprendizaje donde cada uno es protagonista.
Un abrazo,
PAM

Ricardo Miñana dijo...

que estas fechas tan entrañables
en las que compartimos ilusiones y alegrías con mis mejores deseos ¡feliz Navidad!.
un abrazo.